Nuestros comienzos se remontan hasta tres generaciones atrás. Pocos años antes de la Guerra Civil Española, Elías Parra Sanz, fundador que da origen a nuestro comercio de Calzado, trabajaba en un pequeño taller de reparación. Fueron años difíciles, la posguerra no facilitaba el progreso económico. Pero el hambre agudiza el ingenio, y a pesar de que muchos optaron por emigrar, el abuelo Elías decidió reinventarse. En los bajos de su vivienda, montó una fábrica de calzado artesanal con una pequeña tienda al público, situada en la calle Real del Barrio Alto de Almería. Allí comenzó José Verdegay, un muchacho de 14 años, como aprendiz y experto cortador de pieles, que acabó convirtiéndose en su yerno y mano derecha en el negocio.
En la década de los cincuenta y hasta la mitad de los sesenta, se vivieron tiempos de esplendor, la creación de la industria del cine almeriense contribuyó en buena medida a nuestro crecimiento económico, numerosos pedidos de alpargatas y zapatos de todo tipo se recibían constantemente para calzar a cientos de actores y extras de las grandes producciones americanas que eligieron Almería como la meca del cine épico y del oeste. No hay película de romanos de entonces, rodada en Almería, en la que no estuvieran presentes las famosas alpargatas de Elías Parra. A principios de los setenta, llegaron malos tiempos, provocados quizás por varios factores; la decadencia de la industria cinéfila almeriense, la muerte del fundador y la centralización del comercio almeriense; así que, la fábrica y la tienda se cerraron al público.
El testigo lo retomaron José Verdegay y Antonia Parra (hija del fundador), que con más ilusión y valentía que recursos económicos, alquilaron un local en el centro de la capital con ayuda de préstamos familiares. El 25 de octubre de 1974 abrió al público la actual Calzados Eva en la Rambla Obispo Orberá. Trabajaron duro y tuvieron suerte; la economía española resurgía, apareció una clase media y se agilizó un consumo creciente que contribuyó a la expansión del negocio familiar; actualmente consta de tres comercios y seis empleados.
Pero de nuevo han llegado tiempos difíciles, la crisis económica actual hace que la 3ª generación de zapateros, los hermanos Eva, José Elías y Javier Verdegay, recojamos un legado afectado por la misma y creemos necesario un cambio en el sistema de comercio para adecuarnos a la época tecnológica en la que vivimos. Tenemos lo importante, la ilusión, experiencia y el apoyo familiar. Cada una de nuestras generaciones ha necesitado un cambio, una reinvención; el abuelo cambión un taller de reparación de calzado por la fábrica; nuestros padres, se trasladaron al centro de Almería, logrando abrir tres tiendas que siguen abiertas en la actualidad (Calzados Eva, Eva Joven y Totó). Ahora ha llegado nuestro momento, solo esperamos estar a la altura y no defraudar a nuestros antecesores.